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  • Sugerencias de Alava-Araba

    Catedral Santa María de Vitoria – Gasteiz La Catedral es uno de los lugares más impresionantes que encontrarás en tu recorrido de lugares qué ver en Álava. El cual encuentras en Vitoria (capital del país Vasco), en la parte más alta de la colina sobre la que se asentó la primitiva ciudad y que está conformada por un conjunto de edificaciones diferentes que fueron realizadas en diferentes épocas y para diversos usos. Parque natural de Urkiola El siguiente lugar qué ver en Álava es un espacio natural protegido, que agrupa los terrenos de mayor altitud de la Sierra de Aramotz, con una extensión de 5.768 hectáreas. Declarado parque natural en el año 1989, y una de las rutas de paso entre la cornisa cantábrica y la meseta, a lo lago de la historia. Gracias a su belleza y a su fácil acceso, este parque se ha convertido en uno de los lugares más visitados con fines turísticos, y de esparcimiento. Salto del Nervión Nuestra tercera parada nos lleva al Salto del Nervión, otro de los lugares qué ver en Álava. Una maravilla natural ubicada en la provincia de Burgos, y el salto de agua más grande de la Península Ibérica, gracias a sus más de 200 metros de caída libre. Este destino es perfecto para visitar con la familia o los amigos, y que tiene mucho para ofrecer. Lo mejor es que su acceso no es muy difícil, ya que te toma tan solo a 1 hora 30 minutos ir a pie, saliendo de la barrera situada después del pueblo de Untza. Una vez en cerca del salto, está habilitado un sendero con señalización y al llegar puedes encontrar un bello mirador. Artium, Centro-Museo Vasco de Arte Contemporáneo El artium es otro lugar qué ver en Álava, y que además vale mucho la pena, porque se trata de un museo dedicado al arte moderno y contemporáneo, que exhibe una increíble colección de arte vasco y español del siglo XX y XXI. Una de las cosas más curiosas del museo es que a pesar de que en el exterior del mismo encontramos algunas obras, las más relevantes están expuestas en una bodega, bajo el nivel del suelo. Y es que el edificio en sí mismo, tiene una construcción muy peculiar, en la cual quedan tres cuartas partes del museo bajo el nivel de la calle. Otorgándole el nombre de museo-bodega. Bibat, Museo de Arqueología y Museo Fournier de Naipes de Álava Así que por eso le debemos dedicar un tiempo al Bibat, un lugar que fusiona el Museo de arqueología y al Museo Fournier de Naipes, desde el año 2009 en Vitoria, y que es una parada fija qué ver en Álava. En su recorrido te encontrarás como dirían algunos: Con lo mejor de los dos mundos. Por un lado tienes el museo de arqueología, que cuenta con una exposición permanente de aproximadamente 1500 piezas, de la historia de Álava desde la Prehistoria hasta la Edad Media. Bodegas Marqués De Riscal La cual tiene su origen y sede en la localidad de El ciego, en la Rioja Alavesa, donde comenzó su actividad en 1858, siendo la bodega más antigua de Álava. Su impulsor fue Camilo Hurtado de Amézaga, VI Marqués de Riscal, y fue justamente el Marqués quien aportó mayores innovaciones a la industria del vino en la época, al introducir técnicas francesas. Parque de Salburua Como habíamos dicho al inicio, este destino tiene muchos paisajes naturales para ofrecer y entre tantas cosas, debemos incluir en la lista de lugares qué ver en Álava, al parque de Salburua. Se trata de un humedal que está al situado al este de Vitoria, y que es considerado por muchos como la joya de la corona del anillo verde de la capital. Valle Salado El viaje nos ha llevado ahora a uno de los paisajes más espectaculares de Europa, y uno de los mejores conservados. Se trata de una salina que aprovecha cuatro manantiales de agua salada que brotan a su alrededor. Las cuales se ubican en la localidad de Añaña a 60 km de Vitoria. Esta fabrica de sal es muy vieja, de hecho una de las más antiguas del mundo, pues tienen según cálculos, más de 6500 años de antigüedad. Lo más interesante del lugar es que su sal es pura. ya que se dice que proviene de un mar que existió hace más de 200 años. Parque de la Florida Otro de los lugares qué ver en Álava es el parque de la florida. Un parque que te va a encantar porque tiene un aire muy romántico y especial. Se creó en 1820 como un pequeño jardín alrededor de un quiosco de música, y que luego más tarde fue ampliado en el año 1855, para crear lo que vemos hoy. Este lugar te invita a pasear por él, pasar un rato entre sus vistas y disfrutar de él. Catedral de María Inmaculada, Madre de la Iglesia Estamos por conocer la Catedral de María Inmaculada, también conocida como la catedral nueva. La cual encontramos ubicada en el barrio de Lovaina, en la capital alavesa. Su construcción es de estilo neogótico y sus orígenes datan de la primera mitad del siglo XX. Es una catedral muy importante para el país, pero que quedó a medio trabajo, pues la falta de financiamiento hizo que faltaran algunas cosas por terminar sobre todo a nivel decorativo.

  • Sugerencias de turismo en Valencia

    Plaza de la Virgen La Plaza de la Virgen, situada sobre un antiguo foro romano, es la plaza más emblemática y uno de nuestros lugares que visitar en Valencia favoritos. Con un centro impresionante, donde predomina la enorme Fuente del Turia, que rinde tributo al río valenciano, se encuentra rodeada de tres importantes edificios: la Catedral de Santa María, el Palacio de la Generalidad y la Basílica de la Virgen de los Desamparados. Ciudad de las Artes y las Ciencias La Ciudad de las Artes y las Ciencias es un complejo de estilo vanguardista que no estuvo exento de polémica durante un largo tiempo por su alto precio y los problemas con la estructura de alguno de sus edificios. A pesar de los inconvenientes, esta obra de Santiago Calatrava y Félix Candela, inaugurada en 1998, no deja indiferente a nadie y se ha convertido en otro de los lugares que ver en Valencia más imprescindibles. Mercado Central Llegar a primera hora al Mercado Central para poder recorrer los más de 300 puestos con tranquilidad, es una de las mejores cosas que hacer en Valencia. Este mercado, que llevó 18 años su construcción, es una de las grandes joyas del modernismo valenciano de la ciudad en la que además de maravillarte con la arquitectura del edificio que combina metal y vidrio, puedes comprar todo tipo de productos frescos de alta calidad como pescado, marisco, carne, frutas y embutidos. Por la calidad de sus productos y por el tamaño este mercado está considerado como uno de los mejores de Europa. La Iglesia de San Nicolás La Iglesia de San Nicolás y San Pedro Mártir, situada en la comercial calle Caballeros y conocida como la Capilla Sixtina Valenciana, es uno de los lugares que visitar en Valencia más bonitos. Esta iglesia fue reconstruida en el siglo XV en estilo gótico valenciano y posteriormente en el siglo XVII se decoró su interior en estilo barroco. Su última gran reforma terminó en 2016 y corrió a cargo de Gianluigi Colalucci, responsable de la restauración de la Capilla Sixtina del Vaticano. La Catedral y el Miguelete La Catedral de Santa María de Valencia con su famosa torre campanario del Micalet o Miguelete, es otro de los lugares simbólicos que ver en Valencia. En el interior de esta iglesia de estilo gótico construida en el siglo XIII se encuentra el Santo Cáliz, datado del siglo I, que se supone, fue el que utilizó Jesús en la última cena. Otra de las maravillas de la catedral son los frescos renacentistas del Altar Mayor del siglo XV y descubiertos hace 10 años. La Plaza Redonda Recorrer las calles más estrechas del casco antiguo de la ciudad hasta encontrar la original Plaza Redonda, es una de las mejores cosas que hacer en Valencia. Esta plaza, conocida antiguamente como plaza del Clot, destaca por su forma redonda, las cuatro entradas situadas en los puntos cardinales y las tiendas locales que la rodean además de las mercerías que aún se mantienen en la zona central. Lonja de la Seda La Lonja de la Seda de Valencia, declarada Patrimonio de la Humanidad, es otra de las obras maestras del gótico civil valenciano y uno de los lugares que visitar en Valencia imprescindibles. Situada a pocos metros del Mercado Central, este edificio fue construido entre 1482 y 1548 gracias a la riqueza que tenia la ciudad en esa época y ser un centro productor de seda. Entre las salas más destacadas de este edificio se encuentran el Salón Columnario con 24 columnas de 17 metros de altura, el Patio de los Naranjos y el Consulado del Mar, con un impresionante techo gótico de madera. Las Torres de Serranos Las Torres de Serranos es junto a las Torres de Quart, las dos únicas puertas fortificadas que se conservan de la muralla que rodeaba la ciudad en la época medieval y otros dos lugares que ver en Valencia. Estas puertas construidas a mediados del siglo XV de estilo gótico están muy bien conservadas y se puede subir a la parte alta desde donde se obtienen unas buenas vistas del centro histórico y los alrededores, por solo 2 euros. Plaza del Ayuntamiento La enorme Plaza del Ayuntamiento, rodeada de grandes edificios históricos como el Ayuntamiento o el edificio de Correos, es otro de los lugares que visitar en Valencia imprescindibles. En el centro de la plaza se encuentra una gran fuente circular que se ilumina por la noche de diferentes colores y un espacio verde ajardinado y es uno de los lugares más simbólicos durante las fallas, al realizarse la atronadora Mascletà. Estación del Norte La Estación del Norte, de estilo modernista valenciano e inaugurada en 1917, es nuestra última propuesta de la lista de lugares que ver en Valencia más bonitos. Esta gran estación obra del arquitecto Demetrio Ribesque, es la que recibe el mayor tráfico de pasajeros de la Comunidad Valenciana, y destaca por una fachada inspirada en la agricultura local. En el interior de la estación te recomendamos entrar en una pequeña sala, antigua cafetería, que se encuentra a la derecha de la entrada y que combina la decoración en cristal y cerámica.

  • Sugerencias de turismo en Tarragona

    Anfiteatro de Tarraco Durante la época romana, en este recinto con capacidad para unos 14.000 espectadores, se realizaban desde lucha de gladiadores y fieras hasta ejecuciones públicas y en la actualidad se conserva una parte de las gradas de piedra que rodean la arena y que se pueden observar desde el Parque del Anfiteatro. También se puede acceder al interior para ver las bóvedas y los restos de la iglesia de Santa María del Miracle del siglo XII. Circo Romano Otra de las mejores cosas que hacer en Tarragona es visitar el Circo, que junto al anfiteatro, son las dos principales construcciones del Imperio Romano de la ciudad. Este recinto del siglo I d.C. con capacidad para más de 25000 personas, es uno de los mejores conservados de Europa y se utilizaba para las carreras de carros y a día de hoy todavía se puede ver una parte de las gradas y tres de las bóvedas interiores, de las que una de ellas te llevará hasta el Pretorio, una torre romana que facilitaba el acceso por unas escaleras al Foro Provincial. Catedral de Tarragona Subiendo por la Calle Mayor, llena de tiendas de todo tipo, llegarás a la plaza Pla de la Seu donde se encuentra otros de los lugares más importantes que ver en Tarragona, la Catedral de Santa Tecla construida en 1171 en estilo románico que pasó después a estilo gótico, hasta consagrarse en 1331, se construyó sobre el antiguo templo del emperador Augusto, del que todavía se puede ver algún resto en la zona del claustro. Plaza del Forúm La Plaza del Forúm, situada en el antiguo Foro Provincial de la época romana, es otro de los lugares que visitar en Tarragona con más historia. El Foro Romano de la ciudad ocupaba un espacio de 300 metros de largo y 200 de ancho y estaba rodeado de pórticos de los que puedes ver un trozo en el centro de esta plaza. Rambla Nova Pasear por la Rambla Nova, la calle más famosa de la ciudad, es otra de las mejores cosas que hacer en Tarragona. Un buen recorrido empieza en el Balcó del Mediterrani, un mirador situado a 40 metros de altura y con unas vistas increíbles del Mar Mediterráneo, el Puerto y el Anfiteatro. Desde este mirador también puedes ver la playa del Miracle, perfecta para andar o practicar deporte por su Paseo Marítimo y tomarte un baño en los días de calor. Plaza del Pallol Otra de las plazas más interesantes que ver en Tarragona, que tiene restos arqueológicos del Foro Provincial del siglo I d. C., es la Plaza del Pallol. Aquí podrás ver restos de una puerta y una bóveda y las pilastras del Antiguo Beaterio, mientras que en el edificio de la Antigua Audiencia se encuentra trozos de la torre suroccidental con puertas y escalinatas. El Serrallo El antiguo barrio de pescadores del Serrallo es otro de los lugares con más encanto que visitar en Tarragona. Situado junto al puerto en el que atracan desde barcas de pescadores a grandes yates de lujo, en este barrio verás edificios de fachadas de colores, calles estrechas y restaurantes de pescado y arroz, como el emblemático Pòsit del Serrallo. Murallas de Tarragona Recorrer el Paseo Arqueológico, de poco más de un kilómetro junto a la antigua muralla de Tarraco del siglo II a. C., es otra de las mejores cosas que hacer en Tarragona. Esta muralla es la construcción romana más antigua fuera de Italia y llegó a alcanzar los 3500 metros de longitud siendo sus paredes reforzadas durante los siglos XVI y XVII para soportar los ataques con armas más modernas y proteger mejor la ciudad. Plaza de la Font La Plaza de la Font, situada entre la Rambla Nova y el casco antiguo, es la más popular que ver en Tarragona. Construida sobre una gran parte del antiguo circo romano esta plaza tiene en uno de los laterales el edificio del Ayuntamiento, de estilo neoclásico. Además de tomar algo o comer en alguno de sus restaurantes con terraza, esta plaza alargada es perfecta para dejar el coche en su parking subterráneo y empezar a recorrer la ciudad. Acueducto de Les Ferreres El Acueducto de Les Ferreres o Pont del Diable, situado a 3 kilómetros del centro, es otro de los lugares que visitar en Tarragona más imprescindibles. Aunque esta construcción es solo un trozo del acueducto del siglo I a. C. que llevaba agua desde el río Francolí a la ciudad romana de Tarraco, este tramo está perfectamente conservado y se pueden ver dos niveles de arcos superpuestos que alcanzan una altura máxima de 27 metros.

  • Sugerencias de turismo en Lleida

    Guimerà Una de las mejores cosas que hacer en Lleida es pasear por las callejuelas de Guimerá, uno de los pueblos más bonitos que ver en Cataluña. Flanqueado por el río Corb y situado en una ladera de una montaña, este pueblo medieval enamora por sus casas de piedra con detalles en puertas y ventanas, y sus empinadas callejuelas, algunas con arcadas, que te llevarán hasta la Iglesia de Santa María y la torre del castillo, desde donde tendrás unas fantásticas vistas. Parc Nacional d’Aigüestortes i Estany de Sant Maurici El Parc Nacional d’Aigüestortes i Estany de Sant Maurici, es otra de las maravillas que ver en Lleida y nuestro rincón favorito para disfrutar de la naturaleza. Este espacio natural protegido, único en el sur de Europa, te permite realizar rutas de senderismo entre montañas de más de 3.000 metros de altura, lagos de todo tipo y colores, cascadas, ríos y una gran diversidad de fauna y flora. Lleida capital LLeida, la capital de la provincia y una desconocida para el gran público, es una ciudad perfecta para pasar uno o dos días visitando sus numerosos edificios históricos y rincones con encanto. Entre sus edificios más importantes destaca la Seu Vella, una antigua catedral situada en lo alto de una colina que maravilla por su claustro y una alta torre, desde donde observar toda la ciudad y su entorno. Si quieres tener vistas de la Seu Vella con LLeida de fondo, puedes subir hasta el mirador del antiguo Castillo del Rey. Iglesias románicas de la Vall de Boí Estas iglesias que comparten el mismo estilo románico lombardo, fueron construidas entre los siglos XI y XII y declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Además de estar ubicadas en un entorno privilegiado, se caracterizan por la buena utilización de la piedra, la decoración en arcos ciegos y bandas lombaras, las altas torres campanario y la presencia de pinturas murales en alguna de ellas. Penelles Pasear por sus pocas calles es como hacerlo en un museo de arte callejero al aire libre, donde en cada esquina te puedes encontrar una fachada decorada con un espectacular grafiti. Además cada año se celebra un festival en el que vienen reconocidos grafiteros de toda Europa para dejar su huella a base de sprays de colores y poner este pueblo en el circuito turístico de los imprescindibles que ver en Lleida. La Vall d’Aran Empezando por su capital Vielha, te irás encontrando preciosos pueblos de montaña como Bossost, Salardú, Bausén, Bagergue, Les o Artiés, que desprenden encanto por todos sus rincones. Además de visitar estos pueblos de piedra e iglesias románicas como la de San Andrés de Salardú, lo mejor de este valle de prados verdes y picos de más de 2000 metros, es su entorno natural que te permite hacer rutas senderistas difíciles de olvidar. Monasterio de Vallbona de les Monges El monasterio de Vallbona de les Monges, parada obligada de la conocida como Ruta del Císter, que agrupa a varios monasterios cistercienses, es otra de las maravillas que ver en Lleida (Lérida). Fundado en el siglo XII, este monasterio que ha conservado su comunidad femenina durante más de 850 años y en el que puedes hacer noche, destaca por sus dos cimborrios góticos, el hermoso claustro en el que se mezclan el estilo árabe, románico y gótico, y la Sala Capitular con varios sepulcros de abadesas del monasterio. Recorrer el Congost de Mont-rebei Una ruta por el espectacular Congost de Mont-rebei, frontera natural entre Huesca (Aragón) y Lleida (Catalunya), es otra de las mejores cosas que hacer en Lleida. Este desfiladero formado por el paso del río Noguera Ribagorçana por la Sierra del Montsec, tiene un sendero tallado en la roca de menos de 4 kilómetros que te permite disfrutar de unas vertiginosas e increíbles vistas. Montfalcó Murallat Montfalcó Murallat, encaramado en lo alto de una colina, en la comarca de la Segarra, es uno de los pueblos que visitar en la provincia de Lleida más bonitos. Esta preciosa villa amurallada medieval, que tan solo tiene 15 casas y una iglesia de estilo románico, te trasladará por momentos a la Edad Media gracias a estrechas calles, galerías porticadas, arcos adovelados y una plaza central con una cisterna, donde todavía se almacena el agua del pueblo. Pedraforca Pedraforca, una de las montañas más icónicas de Cataluña, situada en la sierra del Cadí, entre las provincias de Barcelona y Lleida, es nuestra última recomendación de lugares que ver en Lleida y provincia. Esta montaña tiene una forma de U muy peculiar, formada por dos picos paralelos de 2.500 metros de altura, unidos por un gran collado (la Enforcadura). De las dos cimas, el pico del Caldeder (2505 metros) es el único que se puede subir a pie, sin tener que escalar, y es recomendable hacerlo siempre con cielo despejado, ya que si llueve la subida se puede complicar.

  • Sugerencias de turismo en Girona

    Las Casas del Onyar Desde el Puente de Piedra tendrás una buena primera perspectiva del precioso reflejo de estas casas sobre las aguas del Río Oñar con el fondo la Catedral y la torre de la iglesia de Sant Feliu aunque para nosotros la mejor vista y foto se obtienen desde el puente de las Peixateries Velles, un original puente de hierro construido por el genial Gustave Eiffel en 1877. La Catedral Una de las mejores cosas que hacer en Girona es subir los 90 escalones de la impresionante escalera de estilo barroco que te dejan delante de la fantástica Catedral. Después del museo entrarás en la nave gótica de la catedral considerada la más ancha del mundo en su estilo en la que además de recorrer todas sus capillas y detenerte delante del magnífico altar mayor, te recomendamos recorrer el precioso claustro. El Call En este barrio de calles estrechas empedradas y preciosos patios, vivió una de las comunidades judías más importantes de occidente que hicieron prosperar al máximo la ciudad hasta su expulsión en 1492. Nosotros recomendamos empezar la ruta en la Catedral recorriendo la calle de la Claveria e ir bajando por callejuelas situadas entre esta y la Calle de la Força como la Calle de Manuel Cundado o la de Sant Llorenç, hasta llegar a la Pujada de Sant Domènec. Baños Árabes Los Baños Árabes, situados cerca de la Catedral, es una construcción románica del siglo XII y uno de nuestros lugares favoritos que visitar en Girona. Estos deben su nombre a la inspiración que tomaron de las termas romanas y los baños musulmanes, y por utilizar el sistema de calor por vapor al estilo árabe. La Muralla La ciudad de Girona está situada en una posición fronteriza y estratégica, por lo que requirió desde sus inicios de la construcción de una muralla defensiva con varios torreones. La primera muralla fue construida en el siglo I a.C. por los romanos y no fue hasta la ampliación en la Edad Media que se creó un paseo que permitía recorrer una de las murallas carolingias más extensas de Europa. Monasterio de Sant Pere de Galligans Entrar en el claustro del Monasterio de Sant Pere de Galligans de estilo románico y construido en el siglo X, es otra de las mejores cosas que hacer en Girona. Esta antigua abadía benedictina, sede en Gerona del Museo de Arqueología de Cataluña, destaca por los preciosos capiteles decorados con motivos vegetales, el campanario octogonal y el claustro románico con más capiteles minuciosamente decorados. Pujada de Sant Domènec Al final de la Calle de la Força llegarás a uno de los rincones más bonitos que ver en Girona, la Pujada de Sant Domènec, una calle escalonada, situada en el corazón del Barrio Antiguo, que está rodeada por el Palacio Renacentista de Calemany, el Palacio de los Agullana y al fondo la iglesia barroca-neoclásica de Sant Martí Sacosta. Como curiosidad, en los escalones barrocos de esta escalera se rodaron varias escenas de la película «El Perfume». Rambla de la Llibertat Pasear por la Rambla de la Llibertat y tomar algo en alguna de sus terrazas, es otra de las mejores cosas que hacer en Girona. Esta comercial calle, antiguo mercado, tiene un aire medieval con varios edificios modernistas y una bonita zona de soportales, que la hacen única en la ciudad. En esta plaza empieza el tour de misterios y leyendas, uno de los más famosos e interesantes de la ciudad. Temps de flors La mejor época para viajar a Girona es a mitad de mayo cuando se celebra una de las fiestas más bonitas que hemos visto: Temps de Flors. Durante 10 días las calles, plazas, patios y edificios principales del barrio antiguo de Girona se decoran con más de 150 preciosos conjuntos florales que llenan de color y aroma todos sus rincones. Escenarios de Juego de Tronos Girona en los últimos se ha hecho todavía más turística al rodarse en varias localizaciones del casco antiguo numerosas escenas de la sexta temporada de la emblemática serie «Juego de Tronos». Aunque ya no hay la posibilidad de encontrarte con sus protagonistas en bares y restaurantes de la ciudad mientras rodaban la película, sí que puedes recordar momentos cumbre de la serie.

  • Sugerencias de turismo en Barcelona

    Sagrada Familia La original “Catedral del siglo XX” de Antonio Gaudí, es el emblema de la ciudad y el monumento más visitado. Su construcción comenzó en 1882 y se espera que finalice en 2026, tan solo 144 años después. El exterior es realmente abrumador con sus 18 proyectadas, y la Fachada de la Gloria, representando la muerte, el juicio final, la gloria y el infierno, la Fachada del Nacimiento dedicada a la natividad de Cristo, y la Fachada de la Pasión que simboliza la crucifixión. Parque Güell Este inmenso parque fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1.984, y es otra de las geniales obras de Gaudí, del cual podremos aprender más en su Casa Museo que se encuentra dentro del recinto. La mejor forma de terminar la jornada es adentrarse en el parque para disfrutar de un tranquilo paseo, lejos del bullicio de la ciudad, y descubrir multitud de esculturas de animales y columnas en forma de árbol, así como el Monumento del Calvario que os regalará las mejores vistas. Catedral Basílica Metropolitana La Catedral de la Santa Cruz y Santa Eulalia de Barcelona se encuentra en el Barrio Gótico, en nuestra opinión, uno de los más especiales de la ciudad, por lo que la visita más que recomendada a la misma será una excusa perfecta para conocerlo. El templo tiene un gran carácter y personalidad, destacando entre otras muchas catedrales que hayas visto con anterioridad. Paseo De Gracia La importancia de esta calle viene dada por los edificios modernistas que en ella se encuentran, como la Casa Amatler, Lleó Morero o Fuster, pero sin duda por las dos realizadas por Antonio Gaudí: Casa Batlló La originalidad de este increíble arquitecto, se aprecia una vez más en la Casa Batló, la obra más representativa del modernismo catalán, edificada entre 1.904 y 1.906. En palabras del propio Gaudí: “No hay líneas rectas ni ángulos rectos en la naturaleza. Por lo tanto, los edificios no deben tener líneas rectas o ángulos rectos”. Casa Milá – La Pedrera Posteriormente, entre los años 1.906 y 1.912, se construyó la residencia de los señores Milá, una familia burguesa de principios del siglo XX, y la cual también puede ser visitada. Lo mejor de esta visita es la azotea, donde unas chimeneas en forma de guerreros os sorprenderán, además de poder ver el centro de la ciudad desde las alturas. La Rambla Desde la Plaza Catalunya, comienza esta mítica calle con un bulevar lleno de quioscos y artistas que harán que tengáis un recorrido de lo más entretenido, con unos lugares que no os debéis perder: Mercado De San José O La Boquería Es el mercado por excelencia de Barcelona, donde se encuentran los turistas y los locales. Ocupa una superficie de 2.500 metros cuadrados y conserva esa cubierta de hierro desde 1914. Entre el animado ambiente de los puestos que ofrecen todo tipo de alimentos, incluso menús ya preparados para degustar los productos típicos de la zona. Mirador De Colón Como no puede faltar en la ciudad que desembarcó Cristóbal Colón después de volver de América, muy cerquita del mar encontramos un monumento dedicado al mismo con un pequeño mirador, al que realmente no merece la pena subir. A tan sólo unos metros de allí, está la zona de Maremagnum, donde el sonido del mar os envolverá. Plaza Real Lleva el nombre de “real” por su belleza. Esta plaza porticada rodeada de palmeras está presidida por una imponente fuente en el centro. También  encontrarás dos farolas diseñadas por Antonio Gaudí. Se trata, sin duda, de una de las zonas más animadas de Barcelona y un lugar muy agradable para comer o beber algo. Gran Teatro Del Liceo Desde el año 1.947, los mejores cantantes a nivel internacional han pasado por el prestigioso escenario del teatro Liceu, a pesar de los numerosos incidentes que ha sufrido a lo largo de su historia, como por ejemplo varios incendios e incluso un atentado. Montjuic Desde la grandiosa Plaza de España, llegaremos rápidamente a este monte en donde se encuentran situados diferentes atractivos de la ciudad, como el Museo Nacional de Arte de Cataluña, la Fuente Mágica que realiza una preciosa exhibición de luz y color, el Pueblo Español, una especie de parque temático que representa los lugares más emblemáticos de España, el Anillo de los Juegos Olímpicos y por último, el Castillo de Montjuic. Monasterio De Pedralbes Este monasterio fundado en 1.327, se encuentra perfectamente conservado, presumiendo de los diferentes lugares donde las religiosas de la orden de las Clarisas, hacían su vida cotidiana, celdas para el retiro durante el día, dormitorios, el claustro y los lugares de culto como la iglesia o la capilla de San Miguel. Iglesia Del Monte Tibidabo El Monte Tibidabo, también llamado la Montaña Mágica, aloja el espectacular templo neogótico del Sagrado Corazón, terminada en 1.961, y justo al lado una ermita más antigua que data del 1.886. Una vez allí, también podréis ver la Torre de Collserola, con casi 300 metros de altura, y la cual fue construida con motivo de los Juegos Olímpicos de 1.992, o pasar el día en el Parque de Atracciones que se encuentra en el mismo lugar. Basílica De Santa María Del Mar La historia más auténtica de esta iglesia gótica, es que fue erigida con las manos de los propios habitantes de la zona entre 1.329 y 1.383.Tiene un aspecto austero con un interior imponente otorgado por las negras piedras, que cogieron este color debido al incendio que sufrió durante la Guerra Civil. Además, suele atraer a muchos ávidos lectores, siguiendo los pasos de Ildefonso Falcones, que se inspiró en este lugar para escribir La Catedral del Mar. Museo Picasso El Museo Picasso es el centro de referencia para el conocimiento de los años de formación de Pablo Picasso, donde se exhiben 4.251 obras que componen la colección permanente. El museo alberga también la serie Las Meninas (1957), así como una completa colección de grabados. Se trata de un complejo de cinco palacios que albergan el Museo Picasso más extenso del mundo y que el artista dedicó a su ciudad de acogida, Barcelona. Palacio De La Música Probablemente más atractivo que el Liceu, el Palau de la Música Catalana, considerado Monumento Nacional, os impresionará con sus coloridas vidrieras y luminosas estancias. Si tienes tiempo suficiente es aconsejable realizar una visita guiada por este edificio modernista, donde os enseñarán las diferentes partes del mismo, destacando los detalles de su vestíbulo, la Sala Lluís Millet, la majestuosa Sala de Conciertos, el escenario y el órgano. Camp Nou El Camp Nou es el estadio del FC Barcelona desde 1957 cuando se inauguró. Con una capacidad de 99.354 personas, es actualmente el estadio más grande de toda Europa. Puedes visitar su museo donde se celebran los colores azul-grana y sus trofeos y fotos más emblemáticos. Playa De La Barceloneta El paseo marítimo del centro de Barcelona nos lleva desde el Puerto Olímpico hasta la playa de la Barceloneta donde podemos darnos un baño y disfrutar de buen pescado y marisco en algún de los millones de restaurantes y bares que se extienden a lo largo del litoral. Callejear Por Barcelona Si tienes más tiempo no dejéis de perderos por las calles del televisivo barrio de El Raval, o lo que eran los antiguos pueblos de Sants, Gracia o Sarriá.

  • Sugerencias de turismo en Asturias

    Cangas de Onís Suele ser un lugar de paso en el que se fotografían los viajeros antes de recorrer el resto de Cangas de Onís o de seguir el camino hacia Covadonga u otras zonas cercanas pero a mí me parece un rincón especialmente agradable para comenzar el día y desayunando en una terraza frente a él. Los Lagos de Covadonga Te habrán dicho una y mil veces que los tanto los Lagos de Covadonga como la zona en la que se encuentran (El Parque nacional de los Picos de Europa) son lugares espectaculares e increíbles. A nosotros nos lo dijeron en infinidad de ocasiones pero por mucho que te lo cuenten, hasta que no llegas allí no te haces una idea. La Basílica de Santa María la Real de Covadonga Está situado justo al inicio de la ruta hacía los lagos pero preferimos dejarlo para la vuelta. De todos los lugares interesantes que vimos en Asturias probablemente este fue el que más nos sorprendió. Quizás porque no se suele mencionar tanto y no teníamos una idea preconcebida del lugar o simplemente por la belleza del sitio. La Santa Cueva En cualquier otra parte, el simple hecho de tener una Ermita embebida en una montaña ya sería sinónimo de una cola de turistas esperando para pagar “religiosamente” su ticket de entrada de pongamos mínimo 10 o 15 euros. En cambio, en Asturias te encuentras esto, gratis y en un lugar totalmente alejado del bullicio. Ya solo por esto, sin contar lo espectacular del sitio, me parece un sitio imprescindible para conocer en Asturias. Si además le sumas que está a escasos metros de la Basílica ya no tienes excusa para no incluirlo en tu ruta. La playa de San Antolín Habrá pocas playas en Asturias que no tengan algo llamativo o encanto suficiente como para evitar visitarlas. La playa de San Antolín no suele ser de las más mencionadas pero me parece especialmente llamativa por la escasa separación que se encuentra entre la playa y el rio que la bordea. Playa de Gulpiyuri Está sí que aparece en todas las listas y no es para menos. ¿Conoces alguna playa que esté tierra adentro? En Asturias existe y merece tanto la pena como las vistas que hay subiendo por los caminos que la bordean hacia el acantilado. Los Bufones de Pria Lo cierto es que no son los únicos que encontraras en Asturias pero sí de los más populares. ¿Qué son los bufones? Pues una curiosa formación rocosa que se produce en algunas zonas en la cual hay un agujero que permite que el agua o el vapor que produce el choque de las olas contra las rocas lleguen a salir por la superficie con un sonido muy curioso. Es un géiser en la costa. Si quieres verlos a pleno rendimiento es mejor visitarlos un día con algo de temporal. Bulnes Aunque no lo creas aún quedan pueblos inaccesibles por carretera en España, en Asturias hay uno y se llama Bulnes. Para llegar hasta el tendrás que subir a través de un funicular que no es precisamente barato (22 euros los adultos). La subida al pueblo merece la pena ya que pocas veces podrás contemplar un sitio tan aislado y relajante. Si más arriba te hablaba de ese pequeño placer de disfrutar de un café frente al puente romano de Cagas de Onís, hacerlo frente a las montañas de los Picos de Europa no se queda atrás. La calle Gascona Ya sé que esto de espectacular como tal no tiene nada, pero permíteme que lo incluya en la lista porque no creo que quieras hacer una ruta en Asturias e irte sin probar una sidra y pegarte un buen homenaje gastronómico. Hay mil sitios donde hacerlo pero si quieres un “todo en uno” resérvate un día en Oviedo para hacer un tour gastronómico como este. Si vas un domingo puede que llegue a ser un poco agobiante (sobre todo si vas con carro de bebé o alguien del grupo tiene movilidad reducida) pero también merece la pena por el ambiente que te vas a encontrar. Playa de las cuevas del Mar Escondida y alejada de las zonas más habitadas se encuentra está playa con unas formas rocosas especialmente curiosas. Desde este lugar también se pueden hacer varias rutas de senderismo en las que te encontraras unos paisajes de postal. Esta playa tampoco entra en todas las listas pero me parece especialmente peculiar respecto al resto. Somiedo Un parque natural que aunque no tiene tanta fama como los Picos de Europa tiene suficientes motivos para visitarlo. Una de las imágenes más conocidas de este parque son estas cabañas tan curiosas. La Cuevona Un pueblo al que se llega a través de una cueva natural, es decir, no se ha perforado el túnel para crear el acceso hasta él. Está cerca de Ribadesella pero aunque hay poca distancia la carretera de acceso requiere de algo de tiempo. Lástima que no lo tuviésemos en ese momento.

  • Sugerencia de turismo en Burgos

    Monasterio de los Huelgas Reales Se construyó en los siglos XII-XIII por orden de Alfonso VIII y su esposa Leonor Plantagenet (hermana del famoso Ricardo Corazón de Leon) para la orden cisterciense, y fue panteón real y lugar de retiro espiritual de las damas de la nobleza de la época. La abadesa era un miembro de la Casa Real. Fueron muchos los privilegios que obtuvo este monasterio llegando incluso a depender directamente del Papa, de tal forma que la abadesa estaba por encima del propio obispo de Burgos. Monasterio de San Pedro de Cardeña Es una abadía trapense situada en Castrillo del Val, a 10 km del centro de Burgos. En esta abadía, el 6 de agosto del año 953, sus doscientos monjes fueron martirizados por los musulmanes, conocidos como los «Mártires de Cardeña». Era en el claustro donde, hasta el siglo XIV se producía un misterioso milagro que tintaba la tierra de color carmesí. La Cartuja de Miraflores La Cartuja de Miraflores es un monasterio edificado en una loma a unos tres kilómetros de Burgos. Es una joya del arte gótico isabelino. Destaca su iglesia con portada occidental y su retablo mayor, obra de Gil de Siloe. Una auténtica maravilla. A los pies del retablo encontramos un conjunto de sepulcros reales obra del artista Gil de Siloé por encargo de la reina Isabel la Católica y que pertenecen a Juan II e Isabel de Portugal. La Catedral de Burgos Esta impresionante catedral declarada Patrimonio de la Humanidad  es uno de los mejores exponentes del arte gótico en Europa. Su construcción comenzó en 1221, siguiendo patrones góticos franceses, aunque en siglos posteriores sufrió algunas modificaciones. En la catedral se conservan obras de artistas extraordinarios, destacando el cimborrio de Juan de Colonia, el retablo de Gil de Siloé y la renacentista escalera dorada de Diego de Siloé. Museo de la Evolución Humana El Museo de la evolución humana (MEH) está situado en el Paseo de la Sierra de Atapuerca, junto al río Arlanzón, en una zona de recreo y esparcimiento para los burgaleses. Diseñado por el arquitecto Juan Navarro Baldeweg, es uno de los museos más visitados en Castilla y León. Se trata de un edificio de amplias dimensiones, de planta rectangular, recubierto en su mayor parte de cristal. El Castillo y las Murallas de Burgos El Castillo de Burgos se encuentra en el cerro de San Miguel elevado 75 metros sobre el nivel de la ciudad. Levantado por el conde Diego Rodríguez Porcelos en el  año 884, en los tiempos de la Reconquista. Fue edificado en el mismo emplazamiento en el que existieron dos torres defensivas. A lo largo de la historia sirvió de prisión de personajes ilustres como los reyes García de Galicia y Alfonso VI de León. Sirvió también como fábrica de pólvora y más tarde, las tropas napoleónicas lo hicieron estallar por los aires. Puerta de Santa María El Arco de Santa María es uno de los monumentos más emblemáticos de Burgos que constituía en la Edad Media una de las antiguas doce puertas de acceso a la ciudad. Este arco comunica el puente de Santa María, sobre el río Arlanzón, con la plaza del Rey San Fernando, donde se erige la catedral. El museo de Burgos y las Casas de Íñigo Ángulo, Miranda y Melgosa El Museo de Burgos se encuentra en el interior de los palacios renacentistas conocidos como las Casas de Íñigo Ángulo, Miranda y Melgosa. La Casa Miranda acoge la sección de Prehistoria y Arqueología y la Casa de Iñigo Angulo la sección de Bellas Artes. La Casa Melgosa y los solares del antiguo Cine Calatravas, aún no restaurados, se destinarán en un futuro a las secciones de Artes Decorativas y de Arte Contemporáneo. Paseo por el Espolón El Paseo del Espolón es el paseo arbolado y ajardinado más céntrico y popular de Burgos. Fue creado a a finales del siglo XVIII configurándose durante el siglo XIX, Conecta el Arco de Santa María con el Teatro Principal y está considerado como “el salón” de la ciudad. Paseo por el Parque Isla Es un paseo de corte romántico que dispone de una gran variedad botánica, así como de varios monumentos que merece la pena visitar. Se encuentra en la margen derecha del río Arlanzón y recorre unos 800 metros,  desde el puente de Malatos hasta el puente de Castilla. A finales del siglo XIX se construye una vistosa y artística cascada, empleando estalactitas y estalagmitas de la cueva de Atapuerca, formándose con ella una gruta abierta en la parte posterior del estanque. Sostienen la parte rocosa dos figuras representativas de otras tantas sirenas.

  • Sugerencias de turismo en Zamora

    Catedral de Zamora La de Zamora es una de las catedrales más pequeñas y antiguas de Castilla y León. Declarada Monumento Nacional a finales del siglo XIX, está inscrita dentro del legado arquitectónico agrupado bajo el nombre de Románico del Duero. Sin embargo, no es el románico el único estilo presente en ella. Castillo de Zamora Mandado construir por el rey Fernando I a mediados del siglo XI, en cuanto te acercas al castillo de Zamora puedes apreciar que su estilo no era palaciego. Su austeridad y la disposición de murallas y edificios dejan claro que su única utilidad era defensiva. Parque Natural Arribes del Duero Los arribes son profundos cañones de rocas metamórficas que llegan a alcanzar los 200 metros de altura. Las aguas fluviales del Duero han ido esculpiendo este paisaje que se extiende por una superficie de más de 100.000 hectáreas, ocupando 37 municipios de las provincias de Zamora y Salamanca. Toro Toro es el rey de la comarca de la Vega del Duero y esas fértiles tierras le rinden el tributo que se merece en forma de estupendos viñedos de calidad. La Denominación de Origen Toro es conocida no solo en España, sino en toda Europa. Parque Natural del Lago de Sanabria y sierras Segundera y de Porto Originado hace unos 100.000 años por las lenguas de hielo de un enorme glaciar, alcanza una profundidad máxima de 53 metros y es, hoy en día, uno de los lugares favoritos de los veraneantes zamoranos que ocupan sus salvajes playas de arena y piedra, mezcladas con arboleda variada. Cuando aprieta el calor, sus heladas aguas no tienen precio. Puebla de Sanabria Se halla a unos 110 km de Zamora, en dirección noroeste. Su estratégica ubicación, junto a la frontera con Portugal, le concedió gran importancia en la Edad Media, siendo villa aforada, fortificada y amurallada. Puebla de Sanabria obtuvo un gran poder político, eclesiástico y militar, lo cual hizo que se generara un importantísimo patrimonio arquitectónico y monumental. Así, en 1994, la villa fue declarada Bien de Interés Cultural. La Tierra del Vino de Zamora La Tierra del Vino de Zamora es una denominación de origen para el vino originario de la comarca vitícola de la Tierra del Vino. En esta denominación quedan englobados 46 municipios de la provincia de Zamora y otros 10 de Salamanca. Aunque la denominación de origen se aprobó en 2007, hay pruebas documentadas que confirman que la elaboración de vino es una actividad que se lleva realizando aquí desde tiempos medievales. Semana Santa de Zamora Quizás no goce de la fama de las procesiones del sur de España, pero el valor artístico de sus imágenes se une a la austeridad, devoción, silencio y sobriedad con la que cofrades y público en general viven la celebración, creando una atmósfera misteriosa que parece de otro planeta. Sierra de La Culebra El mes de octubre es un buen momento para presenciar, en la Sierra de la Culebra, uno de los más espectaculares momentos salvajes que ver en Zamora: la berrea. Los ciervos entrechocan sus cornamentas para intentar imponerse a los demás y poder reclamar su harén de hembras con las que aparearse durante el resto de la temporada. Museo Etnográfico de Castilla y León Uno de los museos más completos que visitar en Zamora es el Museo Etnográfico de Castilla y León. Forma parte de la Red de Museos Regionales de Castilla y León, siendo los otros tres el Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León, el Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León y el Museo de la Evolución Humana, ubicado en Burgos y que tiene la fama de ser uno de los mejores museos antropológicos de Europa.

  • Sugerencias de turismo en Valladolid

    Plaza de San Pablo En torno a esta plaza se fueron configurando, a lo largo de los siglos, los espacios más nobles de la ciudad. Así llegó convertida, en torno al siglo XVI, en el espacio público por excelencia del Valladolid cortesano. Hoy es un auténtico punto neurálgico de visita imprescindible para cuantos viajeros quieren disfrutar de los rincones más singulares de la ciudad. A ella se asoman dos de sus más notables palacios, el Real, frente a la iglesia, y el de Pimentel, a un costado. Museo Nacional de Escultura La estrella de los museos vallisoletanos. De hecho, se proclama con orgullo como el más importante de los museos de escultura policromada de Europa. Y es cierto que su visita se disfruta con mucho goce sea cual sea la sensibilidad de cada cual. La gran recomendación es que, para aprovechar la visita, hay que dedicarle su tiempo. Es decir, al menos un par de horas que, por otro lado, pasan volando. La Antigua La iglesia de Santa María de la Antigua es, además de una auténtica joya del Valladolid más antiguo, uno de sus principales y más reconocibles iconos. No en vano explicar sus orígenes es remontarse al propio fundador de la ciudad, el conde Don Pedro Ansúrez que aquí mismo, en la cuesta que une la calle de las Angustias con la plaza de la Universidad, tendría su casa-palacio. Plaza Mayor En sus orígenes, no era más que un espacio caótico dedicado al mercado en las afueras de la ciudad. Pero en 1561 todo el centro de la ciudad sufrió un devastador incendio y Felipe II decidió aprovechar la ocasión para empezar de cero: de aquella remodelación urbanística ejemplar surgió una plaza Mayor que sirvió de modelo para otras como las de Salamanca y Madrid y varias más en América. Catedral El entorno catedralicio conforma el otro cogollo monumental de Valladolid. El origen de la catedral está en una anterior colegiata ligada a la propia fundación de la ciudad. Sobre las piedras de esta, y a lo largo de muchos siglos, se fue levantando la seo al tiempo que se desmontaba lo anterior. El resultado es un edificio incompleto que lleva en sus trazas la impronta de Juan de Herrera. Merece mucho la pena el Museo Diocesano ubicado en su interior, ocupando los pocos restos que quedan de la anterior colegiata. Universidad y Santa Cruz En torno a la catedral se alzan monumentos de talla como la iglesia de La Antigua, ligada al fundador de la ciudad, el conde Ansúrez, o, por el otro lado, la Universidad. Su fachada es un excelente ejemplo de arquitectura civil barroca. La calle de la Librería conduce hasta el palacio de Santa Cruz. El Campo Grande Tiene a sus espaldas una dilatada historia que ha corrido pareja a los avatares urbanísticos de la ciudad casi desde su fundación, aunque es en 1879 cuando este espacio comienza a cobrar el aire de jardín romántico que perdura hasta nuestros días. De esa época datan muchos de los árboles que conforman hoy su fronda, una de cuyas características principales es la gran variedad de especies. Casa de Cervantes El traslado de la Corte de Madrid a Valladolid en 1601 provocó la instalación aquí de todo el aparato administrativo del Estado. Al rebufo de aquella marea, don Miguel de Cervantes aterrizó en Valladolid en febrero de 1603 para quedarse a vivir en ella el tiempo que hiciera falta. Seguía la estela de una Corte recién instalada en la ciudad con el propósito de resolver en la Chancillería la acusación que se le hacía de haberse quedado con fondos públicos procedentes de su oficio como recaudador. San Benito Junto a San Pablo, la colegiata y la Universidad, éste es uno los edificios fundamentales en la historia de Valladolid. Se levanta sobre los restos del primer alcázar con que contó la ciudad, erigido por Juan I, y del que se descubren sus únicos restos visibles asomando en la acera que bordea el monasterio por la plaza del Poniente. El Museo Oriental El origen más remoto del museo, abierto en 1874, está en la necesidad de familiarizar a los jóvenes misioneros que se preparaban para realizar tareas de apostolado en tan lejanos horizontes. La gran distancia cultural con aquellas tierras o el desconocimiento de costumbres y lengua, hicieron pensar que un primer acercamiento podía venir del contacto con los diferentes objetos y piezas de arte traídas de allí por otros misioneros.

  • Sugerencias de turismo en Soria

    Paseo de la Alameda de Cervantes El paseo de la Alameda de Cervantes, es el principal pulmón de la ciudad. Si has llegado pronto a la ciudad, te recomiendo que te des una vuelta por el parque hasta que se hagan las diez, hora habitual en la que abren los monumentos, como el museo Numantino, que está al lado. Museo Numantino El Museo Numantino, es el principal museo de la ciudad y una de las visita obligadas que ver en Soria. Aquí encontramos los principales hallazgo arqueológicos de la provincia. Con una especial atención al cercano Yacimiento Arqueológico de Numancia. Iglesia de San Juan de Rabanera Seguimos por uno de los templos más importantes que ver en Soria, la iglesia de San Juan de Rabanera (siglo XII). La fábrica original es románica con planta de cruz latina con nave en tres tramos. El ábside es de forma semicircular y el presbiterio de forma rectangular. Muy cerca de la iglesia hay un parque en la que podemos ver alguna de las paredes de la antigua muralla de la ciudad. Iglesia de Nuestra Señora del Espino Seguimos hacia la iglesia de Nuestra Señora del Espino, erigida en el siglo XIV sobre un antiguo templo. El actual edificio, dedicado a la patrona de la ciudad, es el resultado de la profunda remodelación llevada a cabo en el siglo XVI en estilo plateresco, cuando se añadieron las capillas que hacen las veces de naves laterales. La Plaza Mayor La Plaza Mayor de Soria es el centro neurálgico de la ciudad. Es una típica plaza castellana con grandes pórticos y soportales. Aquí se encuentran varios monumentos importantes como el Ayuntamiento, la Fuente de los Leones o la Torre de Doña Urraca. Palacio de los Condes de Gomára Atravesamos el Arco Cuerno llegamos hasta el palacio de los Condes de Gomára, obra civil renacentista del siglo XVI, donde actualmente se encuentra la Audiencia Provincial. Concatedral de San Pedro Finalmente en dirección hacia el río llegamos a la Concatedral una iglesia bastante austera por fuera, pero que encierra un claustro románico. En 1959 recibió el título de Concatedral, compartido con la de El Burgo de Osma. Como curiosidad en esta iglesia Mayor es donde se casó Machado con Leonor y donde cinco años después de la boda se celebró su funeral. Parque del Castillo Detrás de la iglesia de Nuestra Señora del Espino, se abre un sendero. Siguiendo por el camino encontramos la primera bifurcación, a la derecha seguiríamos hacia el parque del Castillo. Del castillo se conserva bien poco, pero junto a la carretera se encuentra un mirador desde donde ver el Duero junto a la ermita de San Saturio, sin duda una de las vistas más bonitas que ver en Soria. Monasterio de San Juan de Duero Volvemos de nuevo a la bifurcación para coger el otro camino, al final de éste llegaremos al río, el cual seguiremos hasta el puente romano. Al otro lado nos espera los restos del monasterio de San Juan de Duero. Es un monasterio fundado en el siglo XII por los monjes Hospitalarios de la Orden de San Juan de Jerusalén. Hoy solo se conserva los arcos que formaban el claustro que son especialmente interesantes, además de parte de una de las salas. Ermita de San Saturio Una vez terminada nuestra visita, seguimos en dirección a la ermita de San Saturio, lo primero que nos llama la atención es el túnel que tenemos que atravesar que no es otra cosa que el monasterio de San Polo. Cañón del río Lobos El Cañón del Río Lobos es una maravilla natural que tenemos en la provincia de Soria, debido a la espectacularidad de su relieve, un singular espacio natural sobre el eje de un profundo cañón con escarpados farallones. Un lugar donde podremos realizar varias rutas de senderismos, una de las más famosas es la que nos lleva hasta la ermita de San Bartolomé, un lugar lleno de misticismo, erigida por los caballeros templarios.

  • Sugerencias de turismo en Segovia

    Acueducto Este acueducto, que llevaba agua a la ciudad desde un manantial situado a 17 kilómetros, impresiona por sus más de 28 metros altura y 167 arcos de la parte que se encuentra en la Plaza del Azoguejo. Además de las vistas que se obtienen de esta plaza, te aconsejamos subir hasta la mitad de la Cuesta de San Juan para disfrutar de una perspectiva todavía mejor de uno de los grandes monumentos que ver en España. El Alcázar El Alcázar, situado sobre una colina en la confluencia de los ríos Clamores y Eresma, es junto al acueducto, la principal atracción turística que ver en Segovia. Este castillo de cuento de hadas, que tiene sus orígenes en la época romana, ha sido restaurado y ampliado por los diferentes monarcas españoles a lo largo de los siglos, desde su construcción en la Edad Media. Catedral de Segovia La Catedral, conocida como la Dama de las Catedrales y situada en la Plaza Mayor, completa el triunvirato de monumentos que visitar en Segovia más imprescindibles. Este enorme iglesia de estilo gótico, construida entre los siglos XVI y XVIII, impresiona por su torre de 88 metros de altura y numerosos pináculos además de por el elegante interior en el que no puedes perderte las 157 impresionantes vidrieras, los tapices realizados en los talleres de Bruselas, el Claustro, la Sala Capitular, la Capilla Mayor y el Altar con excelente retablo. Puerta de San Andrés Recorrer una trozo de la antigua muralla que rodea la ciudad, subiendo por una escalera situada en la Puerta de San Andrés, es otra de las mejores cosas que hacer en Segovia. De esta muralla medieval que alcanza los 9 metros de altura se conservan tres puertas de acceso a la ciudad: la de Santiago, la de San Cebrián y la de San Andrés, siendo esta última la puerta que mejor se conserva, con una torre cuadrada y otra poligonal. Plaza Medina del Campo Después de disfrutar de las vistas de la sierra y de una parte de la ciudad desde el Mirador de Canaleja puedes subir por la Calle de Juan Bravo, pasando por delante de la original Casa de los Picos, hasta llegar a la bonita Plaza Medina del Campo. Esta plaza es nuestra favorita que ver en Segovia, al estar rodeada de importantes edificios históricos como la preciosa Iglesia de San Martín, de origen mozárabe y estilo románico, el Torreón de Lozoya y varias casonas renacentistas del siglo XVI. Barrio Judío En el Barrio Judío o Antigua Judería residió una gran comunidad hebrea desde el siglo XII hasta su expulsión ordenada por los Reyes Católicos en 1492 para en la actualidad convertirse en uno de los rincones con más encanto que visitar en Segovia, al poder pasear por calles como la de la Judería Vieja rodeadas de bonitos edificios. Casa Museo Antonio Machado En el año 1919 el poeta Antonio Machado llegó a la ciudad para ocupar una cátedra en un instituto y se instaló en una habitación de esta casa, que fue una antigua pensión para después abandonar la ciudad en 1932 y con el paso de los años, esta casa convertirse en un recuerdo permanente del paso por la ciudad de este célebre poeta, al mantener intacta su antigua habitación. Una buena opción para seguir la huella que dejó el poeta en la ciudad es reservar este tour de Machado. La Alhóndiga La Alhóndiga del siglo XVI es uno de los pocos ejemplos que se conservan de edificios de estilo gótico industrial que se construyeron durante la época de los Reyes Católicos en el que destaca el exterior por su fachada de estilo isabelino con dos escudos de la ciudad y el interior, que se utilizaba antiguamente para almacenar el grano que abastecía la ciudad. Mirador de la Pradera de San Marcos Bajando por unas escaleras desde la calle Pozo de la Nieve, situadas en un lateral de la colina sobre la que se asienta El Alcázar, llegarás a la ribera del río Eresma donde después de cruzar un puente y andar unos 400 metros llegarás al Mirador de la Pradera de San Marcos, otro de los puntos que visitar en Segovia más bonitos, desde donde podrás disfrutar de las mejores vistas, y más completas, del Alcázar rodeado de un magnífico entorno natural. Iglesia de la Vera Cruz Esta iglesia de estilo románico fue construida en el 1208 por los Templarios o la Orden del Santo Sepulcro, algo que aún no se conoce, tomando como modelo la iglesia del Santo Sepulcro y la Mezquita de la Roca, ambos en Jerusalén. El exterior del edificio destaca por su planta planta dodecagonal, tres ábsides semicirculares y una torre cuadrada y en el interior de dos pisos, encontrarás diferentes banderas de la Orden de Malta, la Capilla de Lignum Crucis donde se encontraba una reliquia de la Cruz, el Retablo de la Resurrección y el Edículo.

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